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Raquitismo, ¿qué niños pueden padecerlo?

El raquitismo es una patología que afecta a la mineralización de los huesos en crecimiento, y por tanto sólo en edad infantil, siendo más frecuente que se manifieste entre los 6 meses y 3 años de edad.

El raquitismo puede producirse por varias causas, pero con más frecuencia se debe al déficit de vitamina D, debido a la disminución de la absorción intestinal de calcio. Como mecanismo compensatorio, el organismo libera la parathormona (PTH), encargada de compensar la disminución de la absorción aumentando la liberación de calcio óseo.

Al faltar la vitamina D, el calcio y el fósforo no se pueden absorber en las cantidades adecuadas de los alimentos. Esto hace que disminuya el calcio en la sangre y se pongan en marcha mecanismos para restablecer los niveles normales en sangre de estos minerales. Esto explica la debilidad de los huesos.

Raquitismo infantil y osteomalacia

Hay que distinguir entre raquitismo infantil y osteomalacia. En ambas hay falta de calcio en los huesos, pero el raquitismo incide en los niños cuyos huesos están creciendo, y la osteomalacia en los adultos, cuyos huesos están formados. Los dos trastornos se producen por carencia de vitamina D y no por un déficit dietético.

¿Qué niños pueden padecerlo?

Los grupos de riesgo en la infancia son:

  • Lactantes amamantados (lactancia materna), de madres vegetarianas o que por razones culturales o religiosas viven con escasa exposición a la luz solar
  • Lactantes prematuros
  • Niños con enfermedades crónicas que afectan al metabolismo de la vitamina D (patologías digestivas,renales crónicas o  cardiacas ) o con enfermedades que precisan protección de la luz solar, como el lupus o el xeroderma pigmentoso

El modo de vida actual conduce a niveles bajos de vitamina D

Algunas circunstancias como el incremento de población en las ciudades, el uso de ropa que cubre la totalidad del cuerpo, el mayor paso de tiempo de ocio en espacios cerrados y no al aire libre, los movimientos migratorios y las campañas de salud que aconsejan la no exposición de los niños al sol para evitar el cáncer de piel, entre otras, han hecho que cada vez las personas y los niños  tengamos menos aporte de luz solar y consiguientemente unos niveles más bajos de vitamina D.

Los síntomas del raquitismo

Al afectar a los huesos en edad de desarrollo, produce un retraso del crecimiento, deformidades y fragilidad ósea y más facilidad para que se produzcan fracturas óseas con traumatismos leves.  Se manifiesta por: 

  • Dolor muscular, debilidad y calambres en el niño
  • Retraso del crecimiento, que influye en el desarrollo psicomotor y en la dentición. Los dientes del niño pueden aparecer como poco esmaltados
  • Deformidades craneales
  • Deformidades de los huesos largos de las extremidades: piernas arqueadas, ensanchamiento de las zonas del cartílago de crecimiento (muñecas, codos, rodillas, tobillos), en la columna vertebral puede producir cifosis (curvatura hacia delante)

Diagnóstico

El médico hará una exploración física para determinar si existen los síntomas expuestos anteriormente, examinará la historia dietética y los tiempos de exposición al sol y en caso de sospecha de raquitismo será necesario un análisis de sangre y también una radiografía de las zonas de cartílago en crecimiento para evaluar las alteraciones óseas.

Prevención y tratamiento

Para prevenir la enfermedad, es preciso que las madres y los niños tengan una correcta y adecuada exposición solar, y una dieta rica en calcio y vitamina D.

La mayoría de los casos de raquitismo se pueden tratar con suplementos de vitamina D y calcio.Sigue las instrucciones del médico de tu hijo en cuanto a la dosis. La vitamina D puede ser perjudicial tomada en exceso.

Para los niños mayores de un año y los adolescentes es aconsejable que estén al sol, sin protección, 10-15 minutos al día durante la primavera, el verano y el otoño. 

Para algunos casos de piernas arqueadas o deformidades de la columna vertebral, puede indicarse un aparato ortopédico especial para posicionar el cuerpo del niño de manera apropiada a medida que los huesos crecen.

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2 comentarios

  1. Isabel a las 1:38 pm

    ¡Hola! Me ha encantado el artículo, gracias por explicar tan claramente la necesidad de vitamina D para la salud ósea.
    Me ha surgido una duda, y es que para evitar el raquitismo (piernas dobladas) en niños, es muy importante que se ingieran cantidades suficientes de omega 3 para sintetizar bien la vitamina D en los huesos, ¿o me equivoco? leía este artículo sobre el tema a la vez que el vuestro y como quiero evitar que eso le ocurra a mis hijos, que con el tiempo que hace donde vivo y lo poco que salimos de casa ven el sol muy poco, quería complementar su dieta con total conocimiento de causa, y quizá era necesario un aporte de omega 3 extra (aparte de la vitamina D3), ya que la carne y pescado no les gustan mucho.
    Muchas gracias de antemano.
    Isabel.

    1. mediQuo a las 5:36 pm

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